El año pasado, la empresa de muebles MillerKnoll presentó un cambio de imagen ecológico de su icónica silla de trabajo Aeron , incorporando más de dos libras de plástico reciclado del océano en su interior. Hoy, la marca de muebles de oficina Humanscale sube el listón a lo grande, ya que revela su nueva silla de trabajo Path .
El Path de $ 1,200 está destinado a demostrar un “nuevo camino a seguir” en un diseño más ecológico, según los materiales de prensa. Cinco años en desarrollo, incorpora 22 libras de plástico reciclado. Y casi la mitad de ese peso está específicamente en plástico oceánico; la silla utiliza 10 libras de redes de pescadores recuperadas en su estructura, atrapando los desechos dentro del diseño nítido
Toda esta reutilización de material ayuda a Path a lograr una calificación climática positiva, pero el material es solo una parte de la historia de producción más grande. Fabricada en Nueva Jersey, en una planta de energía solar que utiliza agua de lluvia reciclada, la compañía de la silla ahorra el impacto de carbono del envío de componentes de producción alrededor del mundo. Cada silla Path producida “elimina 6 kg de CO2e de la atmósfera, repone 15 galones de agua y genera 23 kWh de energía”, según Humanscale.
“Nuestro eslogan es hacer menos daño no es suficiente”, dice el CEO Bob King. “Tienes que empezar a reparar parte del daño”.
En la actualidad, el 60 % de los productos de Humanscale son positivos para el clima (por ingresos), ya que la empresa tiene como objetivo hacer que la gran mayoría, o incluso la totalidad, de su línea sea positiva para el clima en el futuro. La silla Path sirve tanto como un nuevo punto de referencia como un caso de estudio en ese viaje.
Diseñada por Todd Bracher, la silla Path se basa en la línea de sillas Ocean existente de Humanscale, cada una de las cuales incorpora dos libras de plástico oceánico. Bracher pudo superar los límites aún más debido en gran parte a la inversión de Humanscale en la tubería de plásticos oceánicos reciclados, además de algunas innovaciones de diseño significativas.
A primera vista, la Path parece estar tapizada como una silla de oficina de los años 80. De hecho, está viendo un “gorro de baño” tejido en 3D sin desperdicio, como lo llama en broma Bracher. La cubierta tejida aprieta 68 botellas de agua de material en su tejido suave. Sin embargo, a diferencia de las sillas de oficina de antaño, este tejido se teje con tensiones que varían según la zona para soportar las partes del cuerpo de manera diferente. Esto le da una calidad de rendimiento más parecida a unas zapatillas de deporte modernas que a un mueble de oficina retro.
Un desafío importante para el uso de cualquier material reciclado es que puede no ser tan fuerte como los materiales vírgenes, y esto es definitivamente cierto en el caso de los plásticos reciclados de las redes de pesca. “No se puede usar 100 % de red en una parte de la que depende la silla para su resistencia”, dice King. “Es un poco complicado”.
Bracher tuvo que hacer malabares entre dónde aprovechar el plástico de red de pesca y dónde usar otro plástico reciclado para maximizar la integridad estructural de la silla. La distribución de plásticos también se reducía a la estética. Finalmente, Bracher usó plástico reciclado convencional para los puntos de contacto, como el respaldo alto y los reposabrazos de la silla. Luego metió el plástico reciclado de la red oceánica dentro de la silla, donde no lo verías. “No se ve mucho de ese material [porque], por lo general, esos materiales no tienen un aspecto agradable”, dice Bracher, quien señala sus acabados oscuros y, a veces, irregulares. “Lo más probable es que, si no tienes que verlo, sea bueno”.
La base de la silla está hecha de aluminio sin pulir, elegido porque es fácil de reciclar. En cuanto a debajo del asiento: ¿Ve resortes, manijas o perillas de ajuste para inclinar la silla hacia atrás? No. Humanscale ahorró aproximadamente 15 libras de material en la silla debido a un diseño único que equilibra tu trasero en algo así como un balancín en miniatura. A medida que te inclinas hacia atrás, el asiento se levanta solo unos milímetros para usar tu propio peso como contrapeso. El resultado: el 95% de la población puede sentarse en una silla Humanscale, reclinarse tanto como quiera y la silla simplemente se mantendrá en su lugar.
Todos estos elementos se suman a lo que Humanscale llama la silla de trabajo “más sostenible del mundo”. Está disponible en 32 combinaciones de colores por $ 1,200, que está en el rango medio del continuo de sillas de trabajo (la popular silla Sayl de Yves Behar se vende al por menor por aproximadamente la mitad de eso, mientras que la silla Pacific aprobada por Apple de Vitra cuesta más de $ 3,000
King anticipa que los competidores se subirán al carro. Pero no está preocupado. “Creemos que es genial, es genial”, dice. “Entonces, en lugar de impactar entre el 4 % y el 5 % de la industria, podemos tener un impacto en el 100 % de la industria. Y egoístamente, recibimos crédito por hacerlo primero, lo cual también está bien”.
